domingo, 25 de diciembre de 2011

Feliz Navidad y After eight después de las ocho




Mi madre es muy original: después de la mega cena de ayer y la comilona de hoy, ahora tenemos "merienda cena". Y claro, yo a eso no puedo ir con las manos vacías....

Hoy toca comérsela y mañana receta....


Feliz Navidad y espero que os haya traído muchas cosas Papá Noël y si no ¡que los Reyes Magos empiecen a cargar los camellos!

¿A quién se le ocurre hacer una tarta verde el 25 de diciembre? A mí y a otras dos desquilibradas en el mundo....y ¿porqué ese día? Pues porque llevaba tiempo queriendo hacerla, pero no quería  acabar comiéndomela yo sola, y porque a la hora de la comida pregunté y milagrosamente ¡a todo el mundo le gustaba el after eight!








Es algo que nunca entenderé: que haya gente en el mundo a la que no les gustan estas chocolatinas salidas del olimpo de los dioses. Yo es abrir un paquete y no parar hasta ver el final...un día de estos me como un sobrecito sin chocolatina, aunque solo sea porque conservan el olor... Vamos que si las pringles llevan sustancias que generan adicción los after eights deben ser primos hermanos de la cocaína. A pesar de mi obsesión hay mucha gente a la que le parece que es como comer pasta de dientes. Es de esas cosas que adoras u odias a muerte.


En  "Baked, New frontiers in baking"  esta tarta "va de incógnito". Para empezar no hay foto que acompañe a la receta. En un libro en el que hay barritas de chocolate, arroz inflado y mantequilla de cacahuete o tartas de chocolate con caramelo y sal maldon, no llevar foto al lado de la receta es condenar a la pobre receta a los meses/años siguientes a la compra. La primera vez que ojeas el libro se te escapa el dedo como queriendo coger una pizquita del frosting de chocolate, con lo cual en cuanto ves páginas con solo letra...no las haces ni caso.


Luego está el nombre: "Grasshopper Cake". Yo esto necesito que alguien me lo explique, ¿los saltamontes comen after eight? ¿el after eight lleva saltamontes triturados? no, ¿verdad? Entonces ¿porqué narices lo llaman así? Bueno, dejémoslo en que son americanos...

Mi versión no es totalmente fiel al libro: el público era más de chocolate que de menta, así que sustituí el frosting de la receta por un este "swiss meringue buttercream" con esencia de menta y colorante verde, en lugar de rosa. Adapté las cantidades que aparecen en esa página a 2 claras de huevo porque no quería que saliese mucho buttercream.


El resultado: una tarta contundente pero que sabe a menta, sabe a chocolate, es marrón oscuro y verde y recuerda a.....after eight. mmmmmmm. Como lo mío fue una tarta mini, os dejo con mis cantidades. La original, con el frosting original la podéis incontrar en la página de un concursante de "The Great British Bake off", un programa que me encantó y que le recomiendo a todo el mundo. No os digo cómo quedó por si no lo habéis visto...


3 comentarios:

  1. FEliz Navidad, madre mia como se resienten los cuerpos con tanta comida. Esperamos la receta, vaya pinta tiene la tarta. Besos

    ResponderEliminar
  2. Hola! Feliz Navidad Ana! Es reconfortante (se me hace la boca agua) leer tu blog desde el trabajo: la tarta tiene una pinta que, en fin, sobran las palabras... sobre todo viniendo de una adicta a los After Eight como la que suscribe este comentario :-)
    Muchos besos!

    ResponderEliminar